martes, 8 de enero de 2008

"Desayunados, cagados y con el periódico leído...

cuando se venga a trabajar"... así de contundente se mostraba el Consejero de Sanidad de mi región, osease, Asturias, en el discurso ante los trabajadores del SESPA en el pincheo que tradicionalmente se celebra antes de Navidad. Claro, la gente se quedó perpleja ante tal afirmación, habida cuenta de que quien lo hace, ostenta un cargo público, no de pequeña repercusión.
También quiso "felicitar" a los trabajadores que, un año más, se han llevado el sueldo a casa sin dar golpe.

Bueno, no se puede decir que las recomendaciones hayan sido muy afortuadas, sin embargo el fondo es entendible y los que trabajamos en la sanidad pública estamos cansados de ver ineficiencias.

Días más tarde el Consejero ha tenido que salir a la luz para matizar sus declaraciones, afirmando que lo único que ha tratado es motivar a los profesionales, añadiendo que le parece "intolerable que un titulado superior tenga citado a un paciente a las ocho de la mañana y aparezca de la calle a las ocho y media, y encima sin los deberes hechos."

Creo que ya va siendo hora de que alguien nos ponga colorados con esas afirmaciones, y que dé un puñetazo encima de la mesa de una vez por todas. Muchos de los que trabajamos en la Sanidad llevamos tiempo pidiendo alguién así, y ahora que ha venido nos echamos las manos a la cabeza a las primeras de cambio.

No me extrañaría que esto acabara en una huelga, porque si por algo se caracteriza la Sanidad es por lo organizada que puede llegar a ser para protestar haciendo el vago...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La afirmación de ese caballero en principio puede parecer ordinaria, pero es que a veces necesitamos que se nos hable así, como si fueramos niños pequeños, para que nos dé verguenza y hagamos aquello para lo cual nos pagan. Tú hablas de sanidad, yo te hablo de una administración local, que es donde trabajo, porque da verguenza la pasta que se llevan algunos sin dar ni golpe. Lo que más rabia me da, es que eso solo se hace en puestos públicos, que al fin y al cabo, estamos pagando todos, porque en una empresa privada a las mínimas de cambio te muestran donde esta la puerta. Encima, tenemos que aguantar los chistes de los funcionarios, con el famoso "vuelva usted mañana", que sintiéndolo mucho tengo que reconocer que lo he escuchado y padecido. Y qué hacemos? Unos crian la fama y otros cardan la lana.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con vosotros....pero y que me decis de los medicos que firman bajas a todas luces injustificadas?
y de la falta de control en su seguimiento?
Teniendo en cuenta la cantidad de mandos jerarquicos , la cantidad de cabezas pensantes como no han ideado algo para solucionar esto?
Se me ocurren varias ideas.... que tal si incentivamos a los que estan siempre al pie del cañon? .......... o por el contrario penalizamos a esos ( que son siempre los mismos) que se pasan la vida en su casita , sin dar golpe ? ........ seguro que la situacion cambiaba..........

No olvidemos que tambien hay gente responsable , trabajadora...... como dice Irene unos crian la fama y otros ...........

SOMMER dijo...

El asunto de los incentivos en sanidad es algo en lo que se lleva trabajando años, que parece que está implantado en alguna región, pero que en realidad son subidas de sueldo encubiertas.
No es sencillo, en un colectivo tan históricamente poderoso, realizar partidas variables en su sueldo dependiendo de su rendimiento profesional.
No digo que sea lo que haya que hacer, pero si digo que es complejo.