martes, 19 de enero de 2010

En tiempos de crisis...

No era el garito, a decir verdad, lugar de muchos lujos, ni el cantinero galán de alto copete, para que una mujer, que más que mujer era diosa, entrara como dios la trajo al mundo, esto es, desprovista de cualquier prenda, por pequeña que fuera, que tapase sus sobresalientes atributos, o dicho de otra manera, en pelota picada. Pero lo cierto es que sucedió, para sorpresa de mis admirados lectores, cuando la cortesana, descubiertamente y a la vista de todos, se paró frente al sorprendido camarero y dijo:

- Póngame una cerveza bien fría.

El cantinero, viejo roquero en estas lides, continuó secando la copa que tenía entre las manos, mientras, eso si, oteaba a la damisela de arriba a abajo, y de abajo a arriba como mandan los cánones del voyerismo.

La mujer medio-grita: - ¿qué pasa, nunca has visto a una mujer desnuda?

El cantinero, con gesto imperturbable, a pesar de la excelente panorámica, contesta: - Muchas veces...

- y entonces ¿qué mira? – replica la mujer, brazos en jarra.

- Quiero ver de dónde va a sacar el dinero para pagar la cerveza

Y es que, queridos míos, la crisis es la hostia...

martes, 5 de enero de 2010

Hacer el amor en misa

Hay cuestiones, por más simples que parezcan al entendimiento de un torpe de la lingüística como yo, que no llego a comprender. Si el decálogo de los diez mandamientos, como todo buen creyente seguramente sabrá (me sabrán disculpar mis instruidos lectores por mi manifiesta, notoria y ya conocida posición de ateo), aduce que “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, no entiendo como un aplicado agente de la autoridad bávara, en claro ejemplo de profesionalidad y buen hacer, y haciendo uso de su arma reglamentaria, (a saber para los no instruidos, “el tolete”) ha podido ser destituido de su puesto de trabajo por tan transparente manifestación de amor al prójimo.
Si hay alguna duda, le pueden preguntar a la tomante, a juzgar por los aleluyas exclamados en el templo, si no es cierto que el dante (osease, el poli), no ha puesto todo su empeño en magnificar hasta extremos insospechados, tan regio mandamiento.


Digo esto porque según la Agencia EFE de Berlín: "Un policía de la sureña región alemana de Baviera, cuya identidad no ha sido facilitada, ha sido suspendido tras ser sorprendido cuando hacía el amor con una mujer durante la misa de Año Nuevo. Un portavoz de la policía bávara anunció hoy la suspensión del agente de 26 años que fue sorprendido cuando se desfogaba sexualmente con una amiga en el coro de la parroquia barroca de la pequeña localidad bávara de Rennertshofen. Una mujer que subió hasta el coro pilló a la pareja después de que los 25 feligreses que asistían al oficio religioso escucharan unos incesantes e inequívocos gemidos de placer procedentes de las alturas de la iglesia"...

Venga Dios y lo vea....